La economía circular es un modelo de producción y consumo que aprovecha los recursos al máximo y reduce los residuos al mínimo, garantizando un crecimiento sostenible con el paso del tiempo. Es decir, permite alargar la vida útil de los productos que consumimos para darles una segunda vida.
Cada europeo consume una media de 14 toneladas de materias primas anualmente. Mientras tanto, genera 5 toneladas de residuos. El objetivo fundamental de la economía circular es que dichas materias primas y residuos puedan reciclarse, reutilizarse o repararse. Crear un valor añadido de los productos, los cuales se pueden utilizar productivamente una y otra vez, implica reducir los residuos al mínimo, manteniéndolos dentro de la economía siempre que sea posible, y todo esto es gracias al reciclaje.
¿Quién creó la economía circular?
Ellen MacArthur, nacida en el Reino Unido en el año 1976, es la creadora del modelo que hoy en día conocemos como economía circular. Es una exregatista inglesa, una apasionada por el mar que en numerosas ocasiones ha indicado en varias entrevistas que pasar tanto tiempo sola en el barco le hizo pensar, ya que racionaba los alimentos de los que disponía en el barco, sabiendo que se podían acabar en cualquier momento.
Fue en ese preciso instante cuando se le ocurrió la brillante idea de cambiar el modelo de economía lineal que imperaba en el mundo a un modelo de economía circular. Las materias primas son finitas, los productos se consumen y desaparecen. En el año 2010, puso en marcha la «Fundación Ellen MacArthur«, cuyo objetivo principal consiste en lograr un cambio en el paradigma económico que existe en nuestro modelo de consumo de las materias primas de la Tierra.
Ellen MacArthur explica lo siguiente respecto a la importancia de cambiar de una economía lineal a una economía circular:
“La economía global depende de materiales finitos que se consumen y desaparecen. Tiene sentido que se produzca un cambio de paradigma económico en nuestra sociedad, ya que hay más valor añadido en una economía circular que en una economía lineal”.
Ellen MacArthur
¿Cuál es la diferencia entre economía lineal y economía circular?
Se trata de un concepto que se inspira en la naturaleza, donde todos los productos se pueden aprovechar y nada se desperdicia. Hasta hace poco tiempo, seguíamos un modelo de economía lineal, basado en un modelo económico cuya premisa principal es producir, consumir y desechar a un ritmo vertiginoso.
La economía lineal es un modelo que no tiene ningún futuro a largo plazo, ya que implica un coste ambiental muy elevado tanto en el proceso de fabricación de los productos como al finalizar su ciclo de vida. Además, acaba con los recursos naturales de la Tierra e incrementa la contaminación y los residuos que producimos los seres humanos.
El objetivo que tiene la economía circular frente a la economía lineal es dejar atrás el modelo de consumo establecido desde la época de la Revolución Industrial, avanzando hacia un modelo más sostenible que garantice la buena salud de nuestro planeta. Es decir, al sustituir la economía lineal por una economía circular, se alarga la vida útil de los productos.
La esencia de este modelo sostenible se basa en mantener los recursos que disponemos en la economía el mayor tiempo posible, reduciendo el uso de materias primas y la generación de residuos en el mundo.
¿Conoces el modelo de las 7R?
Todos conocemos el modelo de las 3R -Reducir, Reutilizar y Reciclar- las cuales disminuyen el impacto de los productos, que además nos permiten ahorrar energía y recursos. El modelo de economía circular introduce en la cadena de valor añadido de los productos 4R más, ampliando de 3R a 7R, cuyo objetivo primordial consiste en reducir aún más el impacto ambiental.
Las 7R del modelo de economía circular son:
-Rediseñar
-Reducir
-Reutilizar
-Reparar
-Renovar
-Recuperar
-Reciclar
¿Cómo se puede implantar la economía circular?
Hasta hace muy poco, hemos venido desarrollando un modelo de economía lineal cuya finalidad era consumir y desechar a un ritmo alarmante. Se trata de un modelo que no podía perdurar mucho en el tiempo, ya que agota los recursos naturales, incrementando la contaminación y los residuos del planeta.
Las razones principales por las cuales es importante implantar una economía circular son:
Aumentar la competitividad, evitando así la dependencia del exterior.
Apoyar siempre la economía local.
Crear empleos que contengan un alto valor añadido.
Fomentar un modelo de consumo que sea más justo y sostenible.
Meditar cómo fabricar los productos.
Modernizar la industria y promover la innovación.
Preservar nuestra salud y nuestro planeta.
Reducir las emisiones a la atmósfera.
Ser más eficientes y producir más con menos.
Transformar los residuos en recursos.
Las empresas que deseen implantar una economía circular en sus negocios deben tener en cuenta las siguientes cuestiones:
Aceptar la innovación como un riesgo necesario que tienen que asumir.
Asumir el capital natural de sus negocios como un generador de servicios sociales que deben proteger.
Crear de alianzas con los agentes públicos y privados que intervienen en sus negocios.
Entender la responsabilidad que tienen en el entorno donde realicen sus negocios.
La transparencia en los grupos de comunicación es muy importante, además de considerar las expectativas generadas por los grupos de interés.
Optimizar el valor de los productos, servicios o materias primas.
Hay una cuestión muy importante que siempre deberíamos tener en cuenta: ¡el mejor residuo es el que no se produce!
Fuente: Ambientum