Alemania está experimentando el mayor descenso del crecimiento de todos los países desarrollados, afirma el medio ‘Financial Times’. Y esta situación podría empeorar, ya que los economistas advierten de la grave vulnerabilidad de la economía alemana ante los nuevos aranceles previstos por la Administración entrante de Donald Trump.
La economía alemana crecerá solo un 0,6% en 2025, frente al 1,2% previsto a mediados de año, informa el medio, citando datos de la encuesta Consensus Economics. El producto interior bruto (PIB) real de Alemania lleva estancado desde la segunda mitad de 2021, y el declive de la producción industrial —cuyo nivel se mantiene un 10% por debajo de antes de la COVID-19 de diciembre de 2019— no se ha detenido nunca, añade.
A esto se suma la inestabilidad política del país, así como los desafíos geopolíticos a los que se enfrenta el Occidente colectivo en general y Berlín en particular, algo que, según el presidente del Instituto de Economía Mundial de Kiel (IfW Kiel), Moritz Schularick, está golpeando a la economía que sufre el envejecimiento de la población activa, el exceso de regulación y el retraso de la digitalización.
“Los pilares del milagro económico alemán de posguerra [la Segunda Guerra Mundial] —el libre comercio mundial, la industria automovilística y la OTAN— se tambalean al mismo tiempo“, afirmó.
Pero la economía alemana, que durante muchas décadas se ha aferrado a un fuerte sector industrial orientado a la exportación, sobre todo a Estados Unidos, se encuentra en una posición especialmente precaria después de que Donald Trump, que había prometido imponer aranceles más altos a los productos europeos, ganara las elecciones presidenciales de ese país.
La medida en que los fabricantes alemanes dependen del mercado estadounidense queda ilustrada por el hecho de que EEUU representó el 10% de las exportaciones alemanas en 2023 —la cifra más alta en más de dos décadas— y el superávit comercial de Alemania con ese país en 2023 alcanzó la cifra récord de 63.300 millones de euros (66.600 millones de dólares a cambio actual).
Desde 2015, Estados Unidos ha sustituido a Francia como socio comercial más importante de Alemania y su importancia sigue aumentando, mientras que un mercado en rápido crecimiento como China “ha reducido significativamente su apetito por los productos alemanes”, y las sanciones antirrusas han afectado a las ventas a ese país, señala el periódico.
De acuerdo con el Instituto Ifo, las exportaciones alemanas a EEUU podrían caer un 15% si Trump impone los prometidos aranceles del 20% a las importaciones europeas, al tiempo que las de automóviles y productos farmacéuticos se reducirían un tercio en caso de una guerra comercial en toda regla.
“La ansiedad y el nerviosismo entre los empresarios alemanes es muy alta”, comentó al respecto el jefe de comercio exterior de la Federación Alemana de Industrias, Matthias Kramer, añadiendo que el golpe adicional de la introducción de barreras comerciales sería “extremadamente doloroso”.
Por su parte, el jefe del Banco Central de Alemania (Bundesbank) Joachim Nagel hizo hincapié en la amenaza de la “fragmentación geoeconómica”, asegurando que la plena aplicación de los planes arancelarios de Trump podría acabar con un punto porcentual del crecimiento del PIB.
Sin embargo, indica el periódico, los economistas advierten de que Alemania puede sufrir las consecuencias “incluso antes de que se introduzca un arancel”, ya que las empresas dejarán de invertir en su país “por la persistente incertidumbre” y las más grandes podrían reubicar aún más de su producción a Estados Unidos.
Pero no son solo las exportaciones las que sufrirán, prosigue el medio, prediciendo que “incluso en su mercado doméstico, la vida se volverá más difícil para las empresas alemanas”. Por ejemplo, los fabricantes chinos desviarán sus productos a precio reducido a la UE si los aranceles estadounidenses son aún más altos que los de sus homólogos europeos, lo que hará que los productores locales se enfrenten a una mayor competencia y que los márgenes se reduzcan aún más, concluye.
El Maipo/Sputnik