Por Sergio Pintado
El presidente argentino, Javier Milei, entregará a su homólogo brasileño Lula da Silva la presidencia ‘pro tempore’ del Mercosur tras un semestre marcado por su frustrado intento de un acuerdo comercial con EEUU. Expertos consultados por Sputnik destacaron el acuerdo para, al menos, flexibilizar excepciones al arancel externo común.
La cumbre de presidentes del Mercosur, que se desarrollará en Buenos Aires entre el 2 y el 3 de julio, marcará el final de la primera presidencia pro tempore en manos del argentino Javier Milei.
El libertario, que tomó el martillo del bloque en diciembre de 2024, culmina seis meses de gestión atravesados por la crisis del comercio internacional provocada por los aranceles dispuestos por el estadounidense Donald Trump.
¿Un logro diplomático de Argentina?
En diálogo con Sputnik, la analista internacional argentina Florencia Rubiolo consideró como uno de los “puntos a favor del liderazgo argentino” del primer semestre de 2025 el acuerdo para ampliar en 50 artículos la lista de excepciones al Arancel Externo Común.
Según consigna la Agencia Brasil, el acuerdo permite a Brasil y Argentina aumentar de 100 a 150 los tipos de artículos exceptuados del arancel para 2028. Uruguay podrá aumentar de 225 a 275 para 2029 y Paraguay de 649 a 699 para 2030. Si bien la ampliación ya fue negociada entre los equipos técnicos de los países, se espera que los mandatarios ratifiquen el acuerdo durante la cumbre de Buenos Aires.
“A Argentina le tocó lidiar con un cimbronazo estructural del sistema comercial y multilateral debido a los anuncios de aranceles de Trump y haber conseguido el consenso entre los Estados parte para ampliar el listado se puede considerar un logro diplomático de Argentina como líder”, valoró Rubiolo.
Para la experta, la propuesta argentina apuntó a “mantener vigente al Mercosur” en medio de una crisis multilateral mundial, dando al bloque “mayor flexibilidad”, pero evitando “sacrificar” el acuerdo regional, que no permite que, tal como quería Milei, los países pudieran firmar acuerdos comerciales independientes por fuera del bloque.
La analista recordó, en ese sentido, que Milei tomó la presidencia pro tempore con una mirada “ideológica y aspiracional” de poder concretar un acuerdo de libre comercio con EEUU, algo que, a pesar de las expectativas del mandatario argentino, no tenía sustento y acabó de desmantelarse con la política arancelaria de Trump.
A partir de ahí, el Gobierno argentino mostró, según la analista, un “cambio de retórica” que dejó en suspenso las amenazas de salirse del bloque para buscar una negociación con Brasil para, al menos, flexibilizar los aranceles en algunos productos.
Tiempo perdido con la Unión Europea
También consultado por Sputnik, el experto en comercio Miguel Ponce consideró que la insistencia de Milei por buscar un acuerdo imposible con EEUU “ha impedido” que Argentina aproveche su presidencia pro tempore para intentar cerrar el acuerdo con la Unión Europea, en un momento en el Bruselas aparece más urgida por el trato.
“Con la guerra arancelaria, la Unión Europea está necesitada de firmar acuerdos y sus primeras prioridades son México y el Mercosur. Ya podríamos haber dado, durante la presidencia pro tempore de Milei, los pasos necesarios en esa dirección, pero se perdió tiempo”, lamentó Ponce.
Rubiolo, por su parte, apuntó que el rol que no ejerció Milei en la negociación con la UE sí parece haberlo ocupado el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que buscó aprovechar “su rol de liderazgo no solo regional, sino también de proyección global” y la asunción de la presidencia pro tempore en esta cumbre, previendo la posibilidad de finiquitar el acuerdo con Bruselas durante el próximo semestre y con Brasil a la cabeza del Mercosur.
Para Ponce, es vital que Milei comprenda en los próximos años la importancia de mejorar el vínculo bilateral con Brasil, una parte clave de las dinámicas de negociación a la interna del Mercosur. “Es imprescindible desideologizar los vínculos diplomáticos para no seguir perjudicando nuestros vínculos comerciales y económicos”, enfatizó.
Sin embargo, advirtió que difícilmente haya acercamientos entre Argentina y Brasil en los próximos meses, teniendo en cuenta además que los argentinos tendrán elecciones legislativas en noviembre de 2025. “Va a ser difícil que veamos los gestos de racionalidad, prudencia e inteligencia estratégica que se requieren”, añadió.
Al tiempo que insistió en que “es obvio que una oportunidad se ha perdido”, Ponce aseguró que el Mercosur requiere que los presidentes de sus países miembro “estén en relación permanente” en el marco de un mundo en el que “las reglas de juego del comercio internacional ya no existen más”.
Rubiolo se mostró confiada en que las diferencias entre Milei y Lula “no implican que se bloquee el Mercosur”, gracias al funcionamiento de otras herramientas del bloque y los encuentros entre cancilleres y ministros de Economía.
El Maipo/Sputnik
