Un grupo de especialistas estudió un yacimiento en Perú formado por unas piedras grandes y descubrió que es una de las estructuras construidas por humanos más antiguas en la región. El hallazgo cambia algunas creencias sobre el desarrollo de las civilizaciones locales en este período de la historia.
Aproximadamente un siglo antes de que las pirámides adornaran el horizonte egipcio, más o menos en la misma época en que se erigió Stonehenge, cazadores y recolectores del otro lado del mundo construían estructuras megalíticas de piedra que rivalizaban con las de los agricultores.
Uno de los primeros ejemplos hasta la fecha, una plaza circular de 18 metros de ancho construida con grandes piedras verticales, se ha excavado recientemente en un valle del norte de Perú llamado Callacpuma.
Los hallazgos de este antiguo yacimiento, que fue encontrado casi seis décadas antes, sugieren ahora que la plaza tiene unos 4.750 años de historia. Esto la convierte en una de las estructuras monolíticas más antiguas encontradas en toda América. La monumental estructura no solo fue construida antes del verdadero auge de la agricultura en esta región, sino que también es anterior a tecnologías como la cerámica.
“La plaza de Callacpuma es un ejemplo crítico de construcción humana colectiva, construcción de lugares e integración social entre los pueblos de los Andes“, escribe el equipo de investigadores en su artículo publicado en Science Advances.
El extraordinario yacimiento está delimitado por dos muros concéntricos, construidos con piedras megalíticas sin forma ni mortero, cada una de las cuales fue probablemente cincelada de la roca madre expuesta a unos 50 metros de distancia.
Una vez transportadas estas grandes y pesadas losas hasta el yacimiento, las piedras se volcaron verticalmente y se colocaron muy cerca unas de otras. La estructura circular que formaban tenía dos entradas y contenía dos o tres habitaciones. Los arqueólogos afirman que este estilo arquitectónico es poco común en la región.
La datación por radiocarbono del carbón hallado en las proximidades indica que la plaza fue utilizada entre 2632 y 2884 a.C., probablemente con fines religiosos o sociales.
La plaza de Callapcuma podría ser un vástago de tradiciones similares de construcción de plazas en la región. El descubrimiento del yacimiento respalda la idea emergente de que la agricultura no es necesariamente necesaria para que las sociedades humanas construyan estructuras megalíticas permanentes.
Considerar que los cazadores y recolectores nómadas carecen del incentivo o la habilidad necesarios para llevar a cabo tales hazañas es una perspectiva anticuada que se enfrenta a un creciente escrutinio.
“Como en el caso de la arquitectura colectiva monumental temprana fuera de la Sudamérica andina, por ejemplo en Gobekli Tepe [Turquía], la construcción de arquitectura ritual monumental en el Precerámico Tardío de los Andes centrales de la costa y la sierra representó un mundo social cambiante que quizás implicó un cambio de sistemas de creencias relacionados con pequeños grupos a creencias y acciones más colectivas y centradas en la región“, argumentan los investigadores del yacimiento de Callacpuma.
Fuente: El Maipo/Sputnik