Un 16 de julio de 1938, en el pequeño pueblo de Curepto de la región del Maule – Chile, nace Gladys del Carmen Marín Millie, hija de Heraclio y Adriana, él campesino y ella profesora primaria, que junto a sus hermanas Silvia, Nancy y Soria conforman el grupo familiar.
Al abandono del padre, Adriana Millie, madre de Gladys, debe trasladarse junto a sus 4 hijas a Sarmiento y luego a la comuna de Talagante, cursando la educación primaria en la Escuela Pública talagantina, para posteriormente finalizar su enseñanza secundaria en el Liceo N°5 de Santiago.
Gladys Marín seguirá los pasos de su madre, e ingresa a la Escuela Normal de Preceptores, y en paralelo, comienza asistir a las reuniones de la Federación de Estudiantes Normalistas saliendo elegida como presidenta de esta organización estudiantil en el año 1957, mismo año que termina sus estudios y hace su ingreso a las Juventudes Comunistas de Chile, destacándose desde un primer momento por su compromiso y entrega a las tareas del Partido y a las luchas sociales del país.
A partir de la década de los años 60, Gladys ya participa del comité central de las Juventudes Comunistas, y el año 1965 es elegida su Secretaria General, cargo que ejerció hasta el año 1974.
También el año 1965, Gladys Marín es elegida diputada por el Distrito N°2 Santiago, en cual abarcaba las populares comunas de Renca, Conchalí, Recoleta, Independencia, Colina, Til Til, Talagante, Curacaví, Quinta Normal y Barrancas (actual Pudahuel), cargo para el cual fue reelegida con alta votación en las elecciones parlamentarias de 1969 y luego en el año 1973 y que ejerce hasta el golpe de estado.
Desde ese día, Gladys Marín es perseguida. El Bando N°10 de la dictadura, ordenaba la entrega voluntaria e inmediata de 95 líderes de la Unidad Popular, entre ellos, Orlando Letelier, Carlos Altamirano, Miguel Enríquez, Gladys Marín, Luis Corvalán, entre otros, hecho que la obliga pasar a la clandestinidad, y luego, por decisión del Partido Comunista, se asila en la Embajada de los Países Bajos.
En 1976, fue detenido en Chile su marido Jorge Muñoz, padre de sus dos hijos Rodrigo y Álvaro, quién fuera miembro de la Comisión Política del Partido, del que hasta hoy se ignora su paradero.
Desde el mismo 11 de septiembre, Gladys Marín, se puso a disposición de su Partido para contribuir a la creación de la resistencia chilena a Pinochet, canalizando toda su energía y decisión en combatir la Dictadura.
Marín regresa al país en el mayor de los secretos el año 1978 para encabezar el trabajo de la dirección del Partido Comunista y convertirse en una de las más firmes líderes del comunismo chileno para la creación del Frente Patriótico Manuel Rodríguez y su política Rebelión Popular de Masas, que incluía todas las formas de lucha.
En la segunda mitad década de los años 80, Gladys Marín renuncia a continuar con la línea que ella misma impulsó y fomentó tan decididamente a fin de los años 70, asumiendo la nueva estrategia que el PC ya definía junto a otros sectores políticos del país: derrocar al Dictador en la urnas y llamar a votar por aquel entonces candidato Demócrata Cristiano Patricio Aylwin.
Tras el fin de la dictadura en 1990, Gladys Marín fue elegida Secretaria General del Partido Comunista de Chile en 1994.
Desde esa fecha, no descansó en su lucha decidida por los DDHH y por los derechos de los/as trabajadores/as.
El año 1997 se presentó como candidata a senadora por la circunscripción VII Santiago Poniente; alcanzando el 15,69 % (174.780 votos) del total de sufragios, y en junio del año siguiente, 1998, el Partido Comunista la designa como candidata presidencial para la elección de 1999, en representación de la lista Unidad de Izquierda, alcanzando el 3,19 % de los votos.
Gladys Marín el año 2003, es internada en un Centro Asistencial de Salud en Santiago diagnosticándole un tumor cerebral (glioblastoma multiforme), lo que la lleva el mes de octubre del mismo año a la Clínica Karolinska en Suecia para ser intervenida quirúrgicamente.
Gladys fallece en la madrugada del domingo 6 de marzo de 2005 en su casa de Lo Cañas, en la comuna de La Florida, tal como fuera su deseo.
Más de 500 mil personas despidieron a la Pasionaria chilena en el ex Congreso Nacional, decretando el Gobierno de Chile, encabezado por Ricardo Lagos, dos días de duelo oficial.
Fuente: El Maipo
