(Buenos Aires) Hoy, Diego Armando Maradona debería cumplir en vida 65 años; de la pobreza en Villa Fiorito a ídolo de multitudes en el mundo, imposible olvidar su grandeza aunque algunos insisten en borrarla.
Al igual que millones de argentinos, entre ellos dos, lo recuerdan con emoción, sus hijas Dalma y Gianinna, reporta la agencia Noticias Argentinas. Las redes sociales se inundaron de mensajes este 30 de octubre para ensalzar la gloria del mítico goleador que inspiró a una nación en sus momentos más tristes.
Pese a toda esa gloria acumulada, los «libertarios» que hoy gobiernan a Argentina decidieron borrar su imagen de la moneda que acuñará el país para el Mundial de 2026.
El “Pibe” de aquel club infantil “Los Cebollitas” que después se convirtió en “El Pibe de Oro” nació de Dalma Salvadora Franco, “Doña Tota”, y de Diego “Chitoro” Maradona, en Lanús, Provincia de Buenos Aires.
Creció en Villa Fiorito, partido de Lomas de Zamora, en el seno de una familia trabajadora y de escasos recursos. Fue el quinto de ocho hermanos, recuerda el suplemento deportivo 442 del periódico Perfil.
Resumir en 40 líneas la vida y gloria futbolística de un ícono mundial es difícil. Tras destacarse en los campos, lo captaron a los nueve años para la categoría “Los Cebollitas», la inicial del club Argentinos Juniors. Allí se destacó y debutó en la Primera División de esa franquicia con apenas 15 años.
Con Argentinos archivó el mejor registro goleador de su carrera, y en 1979 se consagró campeón del Mundial Sub-20 en Japón, un hito inédito para la categoría, y más tarde obtuvo su primer título en clubes con Boca Juniors.
Después en un ascenso vertiginoso, Maradona hizo historia en Boca Juniors, Barcelona y encumbró al Napoli que jamás había ganado un “Scudetto”. Bajo su liderazgo consiguió dos y así transformó su historia.
De muy joven estuvo en el Mundial de 1982 y su consagración para la eternidad fue en la cita del orbe de México 1986, en la que alcanzó su sueño y la de toda una nación.
Con la “Albiceleste”, intervino en 12 de los 14 goles que marcó la selección en ese inolvidable torneo, y anotó cuatro de los siete en la fase eliminatoria. Marcó un antes y un después en la historia futbolística argentina; nunca antes ni después se resumió tanta gloria en una justa.
Un país dolido todavía por una cruenta dictadura cívico-militar (1976-1983) que desapareció a 30 mil seres humanos y conmovido por la Guerra de las Malvinas (1982), se estremeció hasta el delirio con aquella victoria sobre el equipo de Inglaterra, el “Gol del Siglo” coronó una dulce revancha.
Edgardo Esteban, veterano de las Malvinas, periodista y promotor incansable del justo principio de Memoria, Verdad y Justicia, lo recuerda en una sentida crónica:
“El 13 de junio de 1982, mientras en Madrid se inauguraba el Mundial de Fútbol de España, en el sur helado del Atlántico Sur la guerra de Malvinas vivía sus horas finales, en la batalla de Puerto Argentino”, escribe Esteban en su alabanza como si le hablara al mítico jugador este 30 de octubre.
“A miles de kilómetros de la gloria futbolera” –continúa- “los soldados argentinos escuchábamos por radio —entre explosiones y el frío— el relato de José María Muñoz en Radio Rivadavia, narrando el debut de la Selección con la ilusión de una joven promesa: Diego Armando Maradona. Eras vos”.
Cuatro años más tarde, el 22 de junio de 1986, en el Estadio Azteca, “transformaste el dolor en arte. Frente a Inglaterra —el mismo adversario de la guerra—, esos dos goles que atravesaron la historia: la “Mano de Dios” y el “Gol del Siglo”. Aquella tarde, el fútbol se volvió una revancha simbólica: sin fusiles ni uniformes, un argentino vencía al poder con ingenio, picardía y talento”.
Y resume el cronista: “Para muchos excombatientes, fue una reparación emocional, una victoria desde el juego, una forma de justicia poética. El relato de Víctor Hugo Morales_ ‘Barrilete cósmico, ¿de qué planeta viniste?’ Se convirtió en el eco de un país que volvía a creer en sí mismo. Esa gambeta condensó la dignidad recuperada, el orgullo nacional que había quedado congelado en las turbas de Malvinas”.
El 25 de noviembre de 2020 en medio de la pandemia por la Covid-19 Maradona perdió el partido que jugaba con la muerte. El legendario capitán del seleccionado argentino falleció de insuficiencia cardíaca a menos de un mes después de haber cumplido 60 años.
El Maipo/PL



