(Buenos Aires) Como cada año Buenos Aires celebra el Festival del Tango, su identidad cultural más profunda y pasión más genuina compartida por generacionesm que continúa hoy para alivio en medio de tensiones políticas y económicas.
Mientras desde el mediodía del miércoles hasta casi toda la madrugada los argentinos tenían la mirada puesta en el Congreso que debatía en candente sesión leyes de gran relevancia para sus vidas cotidianas, el emblemático Teatro Colón acogió anoche la gala inaugural de la celebración cuyo nombre oficial es Tango BA Festival y Mundial 2025.
El concierto estuvo dedicado al bandoneonista, compositor y director de orquesta Aníbal Troilo, en el que se escuchó el prodigioso sonido de su conjunto típico Pichuco.
El Bandoneón Mayor de Buenos Aires también distinguió el homenaje en el cual se escucharon las tonadas de los legendarios “Danzarín”, “Mañanitas de Montmartre”, “Milonguero triste”, “Quejas de bandoneón” y “La cumparsita”, además de “Responso”, con los arreglos que les hizo Troilo.
El programa del evento que se extenderá hasta el 2 de septiembre incluye actividades en 36 sedes, desde conciertos, espectáculos, clases, conferencias, milongas, actividades especiales y la ya habitual competencia de baile que reúne parejas de más de 50 países.
Entre otros, ponen sus tablas a disposición de esta singular expresión artística el Teatro Colón, Teatro Presidente Alvear, Cultural San Martín, Auditorio Belgrano, Teatro Gran Rivadavia y el Teatro Devoto, a los que se suman cafés, la Casa Museo Carlos Gardel, El Portuario y el Espacio Cultural El Resurgimiento.
“Tango BA Festival y Mundial es un evento que año tras año no para de crecer y representa profundamente nuestra identidad, al tiempo que consolida a Buenos Aires como una capital cultural global. La cultura tanguera del mundo se da cita donde la vio nacer y la convierte en una fiesta”, expresó en la previa la ministra de Cultura de la Ciudad, Gabriela Ricardes.
Es cierto lo que afirman los aficionados a esta manifestación musical: Buenos Aires es tango, lenguaje porteño que trasciende fronteras y hace que los porteños se sientan ciudadanos del mundo a través del dos por cuatro.
Caben entonces estrofas de “El corazón al sur” de Eladia Blázquez, una de sus más fervientes exponentes:
“Ahora sé que la distancia no es real
Y me descubro en ese punto cardinal,
Volviendo a la niñez desde la luz
Teniendo siempre el corazón mirando al sur”.
El Maipo/PL