(Tokio) La directiva del Banco de Japón (BoJ) rebajó hoy a la mitad su previsión de crecimiento económico nacional para 2025, como consecuencia de los efectos de los nuevos aranceles de Estados Unidos.
Durante la reunión sobre política monetaria efectuada este jueves, la entidad financiera modificó la perspectiva publicada en enero, que hablaba de un crecimiento del producto interno bruto del 1,1 por ciento y ahora lo sitúa en 0,5 por ciento, debido a la guerra comercial iniciada por el presidente norteamericano, Donald Trump.
A su vez, la junta del BoJ decidió conservar sin alteraciones su estrategia sobre política monetaria en medio de una compleja situación económica, nacional y externa.
La economía japonesa se ha recuperado moderadamente, aunque muestra algunas debilidades, expuso un comunicado de la institución al término de la cita.
Diversos economistas prevén que las nuevas tarifas impuesta por Estados Unidos frenarán las exportaciones y reducirán la inversión de capital, lo cual influye de manera directa en las proyecciones de crecimiento económico.
La administración Trump comenzó a aplicar, desde principios de marzo, un arancel del 25 por ciento a todas las importaciones de acero y aluminio.
Otro duro golpe a la economía nipona constituyó la puesta en práctica de una tarifa adicional del 25 por ciento a las importaciones de automóviles de compañías de Japón, un sector económico clave que acapara cerca del 30 por ciento de las exportaciones de este país a Estados Unidos.
Trump anunció tal medida semanas después de decretar un nuevo impuesto del 25 por ciento a los automóviles fabricados fuera de su territorio nacional, por lo que la tasa para los vehículos importados de Japón se sumó a este gravamen.
En el mes de enero, el BoJ incrementó los tipos de interés de referencia a corto plazo hasta el 0,5 por ciento, el nivel más alto en 17 años.
A lo largo de 2024, en un intento de normalizar la economía de esta nación asiática, la entidad financiera dio pasos hacia la retirada gradual de una década de estímulos masivos, pues Japón mantuvo tipos de interés demasiado bajos durante unos 30 años, en medio de una deflación persistente.
El Maipo/PL