(Yaundé) Trabajadores agrícolas de Camerún realizaron protestas que se tornaron violentas ante los bajos salarios y malas condiciones de trabajo, destacan hoy aquí medios locales.
Las manifestaciones, que se iniciaron la pasada semana, en la comuna de Nkoteng, perteneciente al departamento de Haute-Sahaga, en el centro del país, dejaron ya más de 150 hectáreas de campos de caña destruidos, un muerto y numerosos heridos en enfrentamientos con la policía.
Los trabajadores denunciaron condiciones similares a la esclavitud, señalando el costo físico de cortar caña de azúcar en condiciones difíciles por poco salario, por parte de la sociedad Sosucam, una subsidiaria del grupo francés Somdiaa.
Observadores políticos señalan que la situación se agravó después de que los trabajadores protagonizaran una huelga, alegando retrasos en el pago de salarios
Según el alcalde de Nkoteng, unas 20 personas han sido arrestadas, y las actividades agrícolas están paralizadas desde casi diez días, mientras la ciudad se mantiene militarizada.
La inseguridad alimentaria en este país afecta actualmente a 2,5 millones de personas e incluye algunas de las tasas más altas registradas en los últimos tiempos, con un impacto mayor en refugiados, desplazados internos y comunidades de acogida.
El Maipo/PL