Por Ambientum Portal Ambiental
Nairobi se ha convertido en el epicentro de la diplomacia ecológica global al acoger la VII Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente (UNEA-7). Este foro, considerado el principal órgano mundial de toma de decisiones ambientales, se reúne con el propósito de impulsar «soluciones sostenibles» para enfrentar la triple crisis planetaria que amenaza la viabilidad del planeta.
La UNEA-7 se está desarrollando esta semana, de lunes a viernes, en la capital de Kenia. Su convocatoria se produce inmediatamente después de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), celebrada el mes pasado en Belém (Brasil). Un contexto geopolítico frágil y el documento final de la COP30 —criticado por no incluir menciones explícitas a la eliminación de los combustibles fósiles, principal motor del calentamiento— añaden una capa de urgencia y expectativa a la cumbre de Nairobi.
Bajo el lema «Promover soluciones sostenibles para un planeta resiliente», la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen, recalcó la importancia del encuentro el pasado 28 de noviembre. Andersen advirtió que los datos de su agencia muestran que «los impactos ambientales y climáticos se están acelerando e, incluso, intensificando».
La triple crisis y la urgencia de la acción multilateral
La líder del PNUMA enfatizó la gravedad de la situación global: «El aumento de las emisiones está provocando olas de calor récord. La naturaleza y los ecosistemas están desapareciendo en todo el mundo y estamos presenciando la contaminación tóxica de nuestro aire, agua y energía solar». Andersen subrayó que estas son amenazas globales que exigen una acción coordinada, y por ello, la UNEA-7 se centrará en cómo «fortalecer el multilateralismo» para lograr una respuesta unida a lo que la organización denomina la triple crisis planetaria: la crisis del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación y los residuos.
La agenda de la Asamblea es ambiciosa. Los 193 Estados miembros de la ONU debatirán y negociarán un total de diecinueve borradores de resoluciones y decisiones. Estos documentos abordan una amplia gama de temas cruciales, desde la lucha contra incendios forestales y la preservación de los glaciares hasta la dimensión ambiental de la resistencia antimicrobiana y el impacto de la inteligencia artificial en la sostenibilidad.
Expectativas y compromisos de alto nivel
Aunque las resoluciones que emerjan de esta Asamblea no son legalmente vinculantes, su peso es considerable, ya que marcan una primera etapa significativa hacia futuros acuerdos ambientales globales y la posterior formulación de políticas nacionales. Se espera la intervención del presidente de Kenia, William Ruto, durante el segmento de alto nivel del 11 de diciembre, acompañado por otros jefes de Estado aún no confirmados por la sede central del PNUMA en Nairobi.
Andersen admitió comprender la «frustración» que genera la lentitud en la acción multilateral. No obstante, confía en que la cita en la capital keniata pueda «ayudar a impulsar la urgencia y la determinación» necesarias para afrontar las amenazas ambientales comunes y emergentes.
En el marco de la Asamblea, el PNUMA presentará la séptima edición de su informe «Perspectivas del medio ambiente global». Este documento, elaborado por 287 científicos de 82 países, adelantará «soluciones reales» centradas en cinco áreas interconectadas: economía y finanzas, circularidad y residuos, medio ambiente, energía y sistemas alimentarios. La presidencia de la UNEA-7 corre a cargo de Omán, representado por Abdulá Bin Ali Al-Amri, presidente de la Autoridad Ambiental de dicho país.
El Maipo/Ambientum



