(Manila) La proximidad de un tifón y una tormenta tropical motivó hoy a las autoridades de Filipinas a cerrar escuelas y cancelar vuelos por razones de seguridad, debido a las intensas lluvias y vientos.
Ambos fenómenos ya afectan a Luzón, la isla más grande y poblada del país, ubicada en el extremo norte de Filipinas y donde se localiza esta capital.
Según el servicio meteorológico, el tifón podría tocar tierra mañana, en la costa oeste de la provincia La Unión (al norte de Manila) o la de Ilocos Sur y, hasta el momento, registra vientos máximos de 120 kilómetros (km) por hora.
Otras medidas de seguridad incluyen la cancelación de al menos 70 vuelos locales e internacionales por parte de la Autoridad de Aviación Civil de Filipinas, debido al azote de tormentas.
Una tormenta tropical llamada Francisco se situó a 735 km al este del país, pero los meteorólogos creen que su trayectoria la dirige a China, mientras otra identificada como Co-May se encuentra a 210 km al oeste de este archipiélago y favorece el incremento de las precipitaciones.
De acuerdo con la agencia nacional de manejo de desastres en Filipinas, al menos 12 personas perdieron la vida y ocho continúan desaparecidas desde el 18 de julio, a consecuencia de las lluvias monzónicas.
El Maipo/PL



