La Paz, 16 marzo. La certeza de que Bolivia carece de obligación legal ante la política chilena de “reconducción” o expulsión de migrantes de terceros países prevalece hoy en la opinión pública boliviana, tras su esclarecimiento por la Cancillería.
El viceministro de Relaciones Exteriores Freddy Mamani salió al paso a críticas públicas del presidente de la nación vecina, Gabriel Boric, e indicó que no existe ningún acuerdo que genere obligación ante esa política chilena.
“Respecto a que Bolivia no estaría llevando adelante la reconducción de ciudadanos de otros países, entendiendo ésta como una expulsión del territorio chileno, no existe ningún acuerdo, convenio o instrumento bilateral que genere dicha obligación”, afirmó el vicetitular en un mensaje entregado a Prensa Latina.
Aclaró Mamani que “el procedimiento de reconducción, al que se refiere el presidente Boric, es normativa chilena que no genera ningún tipo de obligación internacional”.
En su opinión, el tema de la migración irregular “debe ser abordado con las autoridades de la nacionalidad de la migración de origen, evitando la estigmatización negativa del migrante y cualquier acción que pueda vulnerar derechos humanos”.
Durante una visita al poblado fronterizo de Colchane, el jefe de Estado chileno expresó ante la prensa que Bolivia “no está llevando adelante la reconducción de los ciudadanos venezolanos y colombianos que entran por la frontera”.
Esa zona norteña del país transandino enfrenta una conmoción desde 2021 por la llegada masiva de personas por rutas clandestinas y la reacción xenófoba de los moradores de esas pequeñas localidades.
Desde el 27 de febrero del año en curso el Gobierno de Boric desplegó a las Fuerzas Armadas en puntos considerados críticos de la frontera con Perú y Bolivia, operación que según se informó se extenderá por tres meses.
Como resultado, hasta el momento fuentes oficiales reportan miles de controles y decenas de detenciones.
En sus declaraciones públicas, el dignatario chileno anunció que se reunirá con gobernantes “amigos” de Sudamérica para debatir acerca de la migración irregular, y diversos medios periodísticos indicaron que entre esos mandatarios figuran el de Bolivia, Luis Arce, y de Argentina, Alberto Fernández.
Mamani, por su parte, aseveró que “el Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia siempre está dispuesto al diálogo bilateral, para abordar temas de interés común, más aún con los países vecinos”.
Sobre las declaraciones de Boric, la secretaria de la Comisión de Política Internacional de la Cámara de Diputados, Gloria Callizaya, las calificó de pretexto vinculado a la proximidad del 23 de marzo, fecha consagrada por los bolivianos para reclamar una salida al mar que Chile les arrebató en la Guerra del Pacífico.
Fuente: El Maipo/PL
