(Buenos Aires) Las fábricas en Argentina operan hoy al 60 por ciento, el peor registro desde 2002, y desde que Javier Milei asumió la Presidencia con su política centrada en las finanzas, cierra una empresa por hora y 394 personas pierden su trabajo por día.
Y paralelamente multinacionales clausuran sus empresas y se marchan del país, mientras la inversión extranjera directa (IED) por primera vez en 22 años cerró con números rojos.
Datos del Banco Central de la República Argentna (BCRA) reflejan una salida neta de mil 521 millones de dólares de enero a noviembre de 2025, un resultado que no tiene antecedentes en la serie estadística que comenzó a medirse en 2003.
Esta reversión contrasta drásticamente con el comportamiento histórico de la región y señala un cambio profundo en la dinámica de capitales externos. El fenómeno se explica por una oleada de desinversiones empresariales que abarca desde el sector energético hasta el consumo masivo, pasando por telecomunicaciones y la banca, precisa Luciana Glezer en un comentario para LaPolíticaOnline.
Las cifras del BCRA muestran la magnitud del cambio: mientras el promedio anual de IED de 2016 a 2019 alcanzó los tres mil 235 millones de dólares, ese número cayó a 953 millones en el período pandémico 2020-2023. Ahora, en los primeros once meses de 2025, la tendencia no solo se interrumpió, sino que se invirtió completamente.

El sector energético fue pionero en esta ola de salidas, ilustra Glezer, y amplía:
A fines de 2024, grandes petroleras internacionales comenzaron a desprenderse de sus activos en los yacimientos de Vaca Muerta. ExxonMobil cedió la totalidad de sus intereses a Pluspetrol en una transacción estimada en mil 700 millones de dólares. La malaya Petronas evaluó retirarse del bloque La Amarga Chica y abandonó el proyecto de gas natural licuado que compartía con la empresa argentina YPF.
TotalEnergies de Francia estudió transferir sus concesiones en el norte de Neuquén, mientras la noruega Equinor buscó compradores para sus activos en Bandurria Sur y Bajo del Toro Norte. La Shell comenzó a vender sus estaciones que tiene por el país.

En el ámbito automotriz, varias compañías redujeron su presencia o se fueron recientemente, como Mercedes-Benz, que vendió su planta local de autos a un grupo argentino aunque sigue produciendo camiones, y Nissan, que dejó de fabricar para enfocarse en importar desde México.
Estas salidas se suman a un éxodo general de multinacionales, motivado por la volatilidad económica, con empresas como Renault también ajustando su producción, aunque no se han ido completamente, y la Peugeot dio vacaciones obligatorias y dijo que volvería a abrir en enero.
En menos de dos años, ya son 16 las multinacionales que confirmaron su salida del país y varias más negocian desprenderse de activos, entre estas Burger King, Paramout y Carrefour entre los nombres más emblemáticos.
Y mientras las transnacionales ponen pie en polvorosa, la industria nacional atraviesa una dura crisis y el gobierno no tiene un programa industrial para rescatarla.
De noviembre de 2023 a septiembre de 2025, cerraron 19 mil 114 empresas, según las estadísticas oficiales de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo. Esa caída se tradujo en una pérdida de algo más de 264 mil puestos de trabajo registrados.
Ese volumen de cierres equivale a 29 compañías por día, o 1,2 cierres por hora. Y la pérdida de empleo formal promedia 394 personas por día, es decir, unas 16 puestos clausurados por hora.
El Maipo/PL



