Unos mil 800 trabajadores están a punto hoy de perder sus empleos tras la decisión de la compañía Corona de cerrar 51 tiendas en todo el territorio chileno.
La cadena, con más de 70 años de historia, anunció formalmente la pasada semana que cesará sus operaciones el 10 de julio.
Especializada en venta de vestuario, la firma estaba enfrentando un segundo proceso de reorganización para saldar las deudas con sus acreedores, que finalmente no se concretó.
Corona fue fundada en 1955 por el inmigrante neerlandés Leonard Schupper y siempre se mantuvo bajo administración familiar.
El pasado viernes comenzó a rematar todos sus productos, lo cual provocó grandes aglomeraciones en sus establecimientos.
El Maipo/PL