La agrupación de ultraderecha VOX ha sufrido un sonado descalabro en las pasadas elecciones del 23J. Y una de las razones de más peso para haber perdido 19 escaños es justamente su empeño en negar la evidente crisis climática que afecta al mundo entero en general y al país en particular.
España dice NO al negacionismo climático de VOX. En la plataforma electoral de Vox no se hablaba de cambio climático ni de calentamiento global. Tampoco se proponían medidas de mitigación o de protección de la biodiversidad.
En realidad, se apostaba por los combustibles fósiles, las centrales térmicas y nucleares y el extractivismo. Además de por abandonar el Acuerdo de París, derogar la Ley del cambio climático y retroceder en casi todas las medidas de corte ambiental vigentes. Tanto a nivel nacional como europeo.
El cambio climático es innegable
Más allá de las advertencias que los científicos y los colectivos ambientalistas vienen haciendo hace años, la crisis climática está presente en la realidad cotidiana española. Ya no es cuestión de decir que vendrán olas de calor, sequías e inundaciones. Porque ya están aquí y aparentemente han llegado para quedarse.
Las olas de calor las sufrimos cada vez con mayor asiduidad y virulencia. La sequía campa a sus anchas en las tierras de mitad hacia el sur del mapa. Y en las costas mediterráneas la desertificación se agudiza, mientras hay irresponsables que como leitmotiv electoral llaman a regar (con un agua que ni está ni se la espera). Y cuando caen 4 gotas en ciertos lugares (especialmente donde se urbanizó donde no se debía), las riadas se lo llevan todo por delante.
La Nasa ha advertido que las aguas superficiales del mar están demasiado calientes. Y quienes veranean en el Mediterráneo dicen que la temperatura es mucho más alta que en ocasiones anteriores. Lo cual corroboran las agencias meteorológicas, como AEMET (la que VOX prometió suprimir para evitar que divulgasen bulos sobre el según ellos, inexistente cambio climático).
Lo del Mar Menor no tiene disculpa
A día de hoy en Murcia aún no se ha podido formar gobierno porque VOX ha puesto una línea roja que nadie en su sano juicio puede aceptar. Y ello es derogar la actual Ley del Mar Menor. Una legislación por la que se ha luchado a brazo partido. Y por la que vecinos y foráneos se han manifestado de todas las formas posibles.
Quitar esta ley y sustituirla por otra que amplíe las zonas de cultivo nuevamente. O que rebaje los niveles de protección a nivel urbanístico, medioambiental y ecológico es, como poco, un conato de ecocidio. Y obviar una realidad que nos golpea día a día una irresponsabilidad. Pero, según los resultados electorales, estas son cosas que los españoles no están dispuestos a permitir, ni a los de Vox ni a nadie.
Fuente: El Maipo/ECOTICIAS