Una oscura sátira ideada por el realizador Pablo Larraín, permite retratar con aguda inteligencia al dictador Augusto Pinochet, a su familia y su tan “ansiado legado” de crueldad y ambición sin limites.
El Dictador, interpretado por el actor Jaime Vadell, es un vampiro de 250 años que está cansado de ser recordado como un ladrón y decide poner fin a su inmortalidad.
La película candidata al León de Oro de Venecia, es un filme imperdible y que estará disponible en cines y Netflix.