El gobierno y el Partido Comunista de China (PCCh) consideraron hoy una violación a su soberanía, la reunión entre la líder de Taiwán, Tsai Ing-wen, con el presidente de la Cámara estadounidense de Representantes, Kevin McCarthy.
Los ministerios de Relaciones Exteriores y Defensa, la Asamblea Popular Nacional (Parlamento), la oficina sobre asuntos de la isla del Comité Central del PCCh y la embajada de Beijing en Estados Unidos emitieron comunicados con firmes protestas por el encuentro, desarrollado este miércoles.
De manera general, todas esas entidades deploraron que Washington ignorara la advertencia de China y permitiera tanto la visita de tránsito como las conversaciones de Tsai y el tercer político de mayor importancia en el país.
Condenaron que la taiwanesa incluso hablara con otros congresistas, convirtiera a la escala en una especie de plataforma para hacer declaraciones a favor del separatismo y así enviara una señal equivocada a los promotores de la independencia.
Las instituciones recalcaron que esas acciones violaron el principio de Una sola China, los fundamentos de los vínculos bilaterales con Estados Unidos, la soberanía y la integridad territorial.
Reivindicaron a Taiwán como parte inalienable del gigante asiático, advirtieron del fracaso de cualquier intento por separarla y remarcaron la determinación a reintegrarla.
Entre otras cuestiones, advirtieron que China no se quedará cruzada de brazos y dará una respuesta “firme y efectiva”, tras exigir a la Casa Blanca cortar todos los contactos oficiales con Taipéi y dejar de crear tensiones por el tema más sensible en las relaciones bilaterales.
La nación oriental reaccionó así al encuentro de Tsai y McCarthy, pero se esperan acciones más contundentes e incluso ayer lanzó una operación especial que incluye patrullajes conjuntos e inspecciones en partes del centro y norte del estrecho de Taiwán.
Su ejército lleva días con aviones, buques de guerra, equipos y armamento de última generación desplegados cerca de la isla sureña e involucrados en ejercicios masivos, a fuego vivo y de alta intensidad.
Expertos citados por la prensa local aseguraron que las tropas preparan una maniobra similar a la ejecutada en agosto pasado, cuando estuvo en Taipéi Nancy Pelosi, la antecesora de McCarthy.
Además, tienen listos planes de contingencia para reaccionar según lo que la dirigente taiwanesa diga y haga en su parada estadounidense.
Tsai hizo dos escalas en suelo norteamericano, una el jueves pasado y otra ayer, mientras fue y regresó de su periplo por Belice y Guatemala.
El viaje tuvo lugar luego que Honduras rompió más de 80 años de vínculos con Taipéi el 26 de marzo anterior y los estableció con China.
Desde 2017 dieron ese paso El Salvador, Panamá, República Dominicana, Nicaragua y otras cinco naciones del mundo, con lo cual Taiwán quedó solo con 11 territorios que la reconocen.
Fuente: El Maipo/PL