El caso de las licencias médicas fraudulentas continúa hoy en el foco de la atención pública en Chile, donde la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad crear una comisión especial para investigar estos hechos.
La instancia examinará a la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin), al Fondo Nacional de Salud, los ministerios de Trabajo y Salud y a la Superintendencia de Seguridad Social, entre otras entidades.
El escándalo estalló cuando la contralora general de la República, Dorothy Pérez, dio a conocer que entre 2023 y 2024 más de 25 mil empleados viajaron al exterior durante sus periodos de reposo, lo cual generó 35 mil 585 certificados irregulares.
Casos como estos comprometen la confianza pública en el correcto uso de los mecanismos de protección de la salud y afectan la eficiencia del aparato estatal, afirmaron los legisladores.
En el debate algunos parlamentarios instaron también a extender las investigaciones al sector privado, tras reconocer que no se trata solo de un problema en el ámbito público, ni tampoco es un asunto nuevo.
Por este escándalo debieron renunciar ya más de mil funcionarios, entre ellos el propio vicepresidente del Colegio Médico, Iván Mendoza.
Pero también hay alcaldes, responsables de entidades regionales y municipales, e incluso, hasta 10 miembros de la Policía de Investigaciones.
El Maipo/PL