(Naciones Unidas) Trabajadores humanitarios advirtieron al Consejo de Seguridad de la ONU que el caos causado por el avance del grupo rebelde M23 podría desencadenar una emergencia sanitaria en República Democrática del Congo.
Según el reporte del sitio informativo UN News, los equipos de ayuda de la Organización Mundial de la Salud (OMS) no pueden desplazarse libremente para prestar apoyo a los hospitales, ni siquiera las ambulancias pueden circular.
“Es una situación que, en materia de salud pública, es una pesadilla”, afirmó el doctor Boureima Hama Sambo, representante de OMS en el país africano.
El funcionario calificó de “terribles” las condiciones en la capital provincial, Goma, que permanece sin agua corriente ni electricidad y con civiles atrapados, incluidos profesionales sanitarios.
Los desplazamientos masivos en esa nación generan condiciones ideales para la propagación de enfermedades endémicas en los campamentos, donde viven ahora unas 700 mil personas, y las comunidades, incluidas el cólera (más de 22 mil casos y 60 muertes en 2024), el sarampión (cerca de 12 mil casos y 115 muertes) y la malaria, así como la desnutrición infantil crónica.
La OMS reporta que los pacientes de mpox huyeron del centro de tratamiento de al menos un campamento y ahora viven en centros de acogida y con familias.
“Tenemos miedo de que la enfermedad se esté propagando ampliamente en las comunidades, pero en este momento no podemos decirlo porque no hemos podido llegar allí y evaluar lo que está sucediendo”, afirmó Hama Sambo.
La agencia de las Naciones Unidas para la Infancia da cuenta del aumento del número de niños separados de sus padres, lo que los hace vulnerables al secuestro, al reclutamiento por parte de grupos armados y a la violencia sexual.
El ente solicita con urgencia unos 22 millones de dólares para el suministro de agua potable, saneamiento adecuado, suministros médicos, tratamiento para niños con desnutrición severa y servicios de protección.
El Maipo/PL